domingo, 22 de marzo de 2020

CORONA VUELING



Hace unos días recibo un email de Vueling comunicándome que mis vuelos de Semana Santa a Barcelona están cancelados por la crisis del coronavirus. En ese email me ofrecen dos alternativas: cambiar mi vuelo para uno anterior o uno posterior hasta 60 días abonando la diferencia si es más caro (si es más barato no devuelven nada, faltaría más), o bien el reembolso. No tengo dudas, ya en la página web de Vueling le doy a la opción de “Reembolso”. Voy aceptando varias páginas para hacer ese trámite. Debo decir que en todo momento sólo se menciona la palabra reembolso, sin ninguna información adicional, por lo que cualquier observador imparcial, creo, tenderá a dar por sentado que te van a devolver el dinero. El trámite es muy sencillo, realizado con éxito –me dice la web- y añade que recibiré un email de confirmación.

A continuación recibo un email en el que dice textualmente: “Si su solicitud es de reembolso, recibirá un correo electrónico en los próximos 10 días con un bono por el importe total de su reserva para usar en su próximo viaje. El cupón es válido para todas las compras a través de la página web de Vueling hasta el 31 de diciembre de 2020.” 

¡Eh! ¿un bono? ¿que además caduca este mismo año? Que hijos de puta, pienso. Sinvergüenzas, estafadores, y otras lindezas que prefiero no reproducir aquí. El mismo email me ofrece la oportunidad de responder: “Por favor, utilice esta referencia para futuras consultas sobre este caso, o responda a este mismo correo electrónico.”

Respondo al correo exigiendo la pasta, la guita, la plata, el parné, el dinerito contante y sonante. No lo digo con estas palabras, por supuesto, pero se me entiende todo.
Inmediatamente recibo un email que no dice nada sustantivo, que no aclara, donde se dice que puedo gestionar mi reserva en la página web (lo intento pero no hay posibilidad de solicitar el dinero).

Yo, incombustible, insisto con otro correo. Automáticamente recibo otro email donde me dice literalmente: Tras haber dado  resolución a su reclamación en nuestro anterior escrito, hemos vuelto a revisar el caso que nos ocupa, comprobando nuevamente que nuestra compañía actuó en todo momento conforme a nuestras Condiciones de Transporte y a la Normativa Europea vigente de Navegación Aérea.

¡¿Que han vuelto a revisar el caso?! ¡Pero si no ha dado tiempo, mamones! Si me habéis respondido ipso facto.

El mecanismo está claro. Es obvio que ningún ser humano lee los emails de reclamación, no he conocido a nadie que lea tan rápido. El programa está configurado para responder automáticamente con mensajes vagos, genéricos,  y siempre denegatorios. Ni siquiera disimulan dejando pasar unas horas.

Estoy convencido que si les escribiera un email con cualquier escrito, por ejemplo, “En un lugar de la Mancha de cuyo nombre…”, la respuesta sería la misma. Y si les escribiera un texto del siguiente tenor: “Yo, (mi nombre), en pleno uso de mis facultades mentales deseo legar todos mis bienes a la compañía VUELING AIRLINES,…” también en ese caso responderían: “Una vez más, lamentamos no poder proceder a su petición en los términos que usted nos solicita. Por ello, procederemos a cerrar el caso dando por finalizada la tramitación del mismo.”

En fin, esto es lo que hay.